Calentar el gallinero en invierno con una lámpara de infrarrojos
Una luz roja para el gallinero es una solución sencilla y eficaz que protegerá a las aves de la hipotermia en invierno. Las gallinas se sentirán cómodas en el gallinero y seguirán poniendo incluso con tiempo helado, lo que no puede hacerse sin calefacción adicional. Pero para hacerlo bien y evitar problemas, hay que entender el tema.
Para qué sirve la lámpara roja
Muchos avicultores creen que no tiene sentido calentar el gallinero en invierno, pues las aves ya están pasando por este periodo. Pero si se utiliza calefacción adicional, el efecto será este:
- Las gallinas no dejarán de poner incluso durante los periodos más fríos. Y muchos granjeros afirman que las gallinas ponedoras producen incluso más huevos en invierno bajo la luz infrarroja que en verano. Esto se debe a que se crea un microclima favorable en el interior y el número de huevos disminuye sólo durante los períodos de muda.
- La temperatura se mantiene en un nivel normal y las aves no se congelan. Si las gallinas están expuestas a una hipotermia prolongada, es mucho más probable que enfermen. En el mejor de los casos, su cuerpo se debilita y tarda más de un mes tras el inicio del celo en restablecer los procesos vitales normales y la puesta de huevos se resiente.
- La radiación infrarroja tiene un efecto positivo en la salud de las aves y no supone ningún peligro para ellas. Además, muchos organismos patógenos y plagas son eliminados por el uso continuo. Esto crea un microclima favorable para las aves.
- Los pollos sobreviven mucho mejor al invierno. No sufren hipotermia, la comida tiene una temperatura agradable y el agua potable nunca se congela.
¡Por cierto! Para que la lámpara para gallinas tenga efecto, el gallinero debe estar preparado antes del invierno. Para ello, hay que aislar las paredes y el suelo de la habitación. También se utiliza una gruesa capa de ropa de cama, que no sólo protege del frío, sino que también almacena el calor.
Ventajas e inconvenientes de la calefacción por lámparas de infrarrojos
Como cualquier otro tipo de calefacción, los calefactores de infrarrojos tienen ventajas y desventajas. Hay que investigarlos a la hora de elegir para entender las características y tomar una decisión sensata.
Ventajas
Hay muchas más ventajas que desventajas de la lámpara del gallinero. Por ello, se utilizan con tanta frecuencia en diferentes regiones, incluidas aquellas en las que las heladas invernales alcanzan los -40 grados. Las principales ventajas son las siguientes:
- Es la forma más ecológica de calentar un gallinero. Las lámparas no queman oxígeno en la sala y no emiten sustancias nocivas, lo que permite crear un microclima ideal para las gallinas ponedoras. Esencialmente, la calefacción por infrarrojos proporciona las condiciones en las que las gallinas se sienten mejor, por lo que incluso el invierno no es un obstáculo para cosechar tantos huevos cada día como en verano.
- El sistema funciona en diferentes condiciones con la misma eficacia. No es necesario asegurar una humedad óptima. Incluso si el aire del gallinero es demasiado húmedo, la lámpara puede encenderse sin restricciones. Con el tiempo, se asegurará de que la humedad se reduzca al calentar el aire y que se mantenga en un nivel óptimo, lo que también es importante.
- La radiación infrarroja tiene un efecto positivo en la inmunidad de las gallinas, aumentando su resistencia a las enfermedades. También normaliza los procesos metabólicos y mejora la función del tracto gastrointestinal. El calor de la lámpara es lo más parecido a la luz solar natural, por lo que es bueno para las capas.
- La eficiencia es una de las más altas. La lámpara no calienta el aire irradiando calor, sino que calienta todas las superficies que tiene debajo, la eficiencia es un orden de magnitud mayor. Es el espacio contiguo el que se calienta, el calor sube según las leyes de la física y calienta a las gallinas en el gallinero. Esta opción es la más adecuada para los gallineros.
- Lámparas de infrarrojos emiten longitudes de onda cortas, medias y largas. Esto calienta las superficies a diferentes distancias de la fuente de radiación. Esto asegura una alta eficiencia en habitaciones de diferente tamaño y construcción.
- Este tipo de calefacción es mucho más fácil de instalar que cualquier otro tipo de calefacción. Lo único que hay que hacer es instalar el cableado y fijar las lámparas en los lugares adecuados. Si instalas calefacción por agua, tendrás que instalar tuberías, el horno es mucho más complejo y caro. Los costes son bajos, lo que también es importante, y el sistema se puede montar en un día.
- No se crean corrientes de convección durante el funcionamiento, por lo que el polvo no circula por el gallinero y no se altera el microclima. Además, no arde, por lo que no hay olores desagradables y el aire no se seca demasiado.
- Las lámparas y los calefactores son silenciosos, lo que también es importante porque los pájaros pueden no reaccionar bien al zumbido constante.
¡Por cierto! Las lámparas pueden retirarse en una hora si es necesario. También es importante que se pueda apagar en cualquier momento: no es una cocina que se enfríe durante mucho tiempo.
Desventajas
Esta solución también tiene desventajas que hay que tener en cuenta a la hora de elegir un método de calefacción para el gallinero. No hay tantos como profesionales:
- El alto precio de las lámparas. No tienen una vida útil muy larga, por lo que es necesario cambiarlas periódicamente. Pero si se compara con el precio de la calefacción por agua o por estufa, el dinero ahorrado durará decenas de años.
- La superficie se calienta hasta alcanzar una alta temperatura. Por lo tanto, la fuente de calor debe instalarse de manera que ningún ser humano o pájaro pueda entrar en contacto con el calentador. Puedes hacer algo diferente e instalar un marco de alambre de protección para evitar el contacto accidental y proteger el gallinero del fuego.
A la hora de comprar, elija lámparas y calefactores de fabricantes reputados con documentos y garantía. Hay muchas versiones de baja calidad a la venta, no calientan bien la habitación y no duran mucho.
Estamos comparando dos calefactores: uno de infrarrojos y otro de cerámica.
Tipos de calefacción por infrarrojos para el gallinero
Hay tres variedades principales que pueden utilizarse en el gallinero. Cada uno tiene sus propias características especiales, por lo que vale la pena considerar todas las opciones antes de tomar una decisión.
Lámpara
La lámpara calefactora para aves de corral es la más utilizada por su sencillez y disponibilidad. Esta opción también se denomina bombilla de espejo de infrarrojos debido a su diseño. Características principales:
- Es posible seleccionar la lámpara adecuada para cualquier tamaño de habitación, ya que la potencia varía. Recomendado por el fabricante, normalmente se necesita una variante de 250 vatios para un gallinero de 12 m².
- Una lámpara de infrarrojos para calentar el gallinero tiene una eficacia del 98%. Esto significa que casi toda la electricidad se aprovecha y las pérdidas son mínimas.
- El elemento no sólo calienta sino que también ilumina la casa. Proporciona una luz tenue que hace que los pájaros se sientan bien.
- Se puede colocar en cualquier lugar y no es demasiado grande, por lo que es fácil de instalar.
¡Por cierto! Si es necesario, puedes añadir una lámpara más, quitar una lámpara más o reducir la intensidad de calentamiento sustituyéndola por una versión de menor potencia.
Calentador de onda corta
Esta solución calienta muy bien las superficies que se encuentran a poca distancia del calentador. Por lo tanto, es adecuado para habitaciones pequeñas con techos bajos. Las características son las siguientes:
- La bobina de calentamiento está en un tubo de vidrio, que se calienta hasta 600 grados cuando está en funcionamiento, lo que no es seguro. Por lo tanto, la parte delantera siempre está cubierta con un marco metálico.
- La fijación debe realizarse siguiendo estrictamente las instrucciones del fabricante, respetando las distancias mínimas y asegurando una correcta colocación.
- La radiación de onda corta es desfavorable para el ser humano. Los pájaros lo toleran mejor, pero también deben utilizarse otras opciones si es posible.
A la hora de seleccionar estos modelos, conviene tener en cuenta el espectro de ondas que emiten. Elija el calentador adecuado para la ubicación de la casa.
Calentadores de onda media y larga
Considerada como una de las mejores soluciones tanto para los gallineros como para las viviendas. Emiten ondas seguras para las personas y las aves y crean un microclima saludable en el que se eliminan los agentes patógenos. Las características son las siguientes:
- La superficie de calentamiento suele tener forma de panel plano. Irradia el calor de manera uniforme y lo distribuye a una zona concreta. Cuanto más alto sea el techo, mayor será la superficie a calentar.
- Muchos modelos tienen una distancia mínima del calentador al suelo. Esto debe respetarse para evitar el sobrecalentamiento.
- Como los calentadores se colocan a gran altura y la superficie se calienta hasta los 230 grados, no es necesario instalar un marco. Sólo se utiliza si hay riesgo de contacto accidental con el panel.
Seleccione los modelos en función de la superficie y el tamaño de la habitación. Si la habitación es estrecha y larga, es más fácil instalar dos calefactores pequeños en lugar de uno potente.
Cómo instalarlo correctamente
La bombilla del calentador para el gallinero no se instala de la misma manera que los calentadores, por lo que es necesario desmontar estas soluciones por separado. El proceso es sencillo y puede hacerse en unos minutos.
Preparando
Esta parte del trabajo es la misma independientemente del tipo de calentador de infrarrojos que se utilice. Consta de los siguientes pasos:
- Elija el tipo en función de la superficie del gallinero y de sus características. Compre el modelo adecuado y estudie previamente las recomendaciones de instalación para asegurarse de que puede colocarse correctamente en la habitación. Es mejor poner lámparas y calefactores en el techoEsta es la mejor manera de hacer que funcionen eficazmente.
- Compre todos los accesorios necesarios. Si no se incluye ningún termostato, es mejor comprar uno por separado e instalarlo. Esto evitará que la lámpara o el calefactor sobrecalienten la habitación, ya que el termostato lo apagará cuando se alcance la temperatura deseada. Esto garantizará un funcionamiento con ahorro de energía y reducirá el consumo de electricidad al menos a la mitad.
- Instalar un disyuntor independiente en el cuadro eléctrico para la calefacción del gallinero. Esto garantiza la desconexión de la red eléctrica en caso de cortocircuito o sobrecarga y permite desconectar el suministro eléctrico en una sola habitación sin que la casa quede sin energía.
- Lleva el cable al gallinero. Selecciona el método en función de las condiciones, puedes utilizar una opción aérea o cavar una zanja y colocar el cableado en una tubería de polietileno de alta densidad, llevándolo al interior.
- Coloque el cable a través del gallinero en una corrugación especial hecha de material no inflamable. Llévalo a la futura ubicación, dejando una pequeña cantidad de cableado para la conexión.
- Es mejor utilizar un interruptor en el sistema para no tener que ir a otra habitación para encenderlo.
Sección del cable tamizar la sección del cable en función de la potencia del aparato en uso.
Instalación de las luces
Antes de empezar a trabajar, elige una ubicación para uno o varios focos y piensa en un sistema de montaje. Realice el trabajo de la siguiente manera:
- Coloca un gancho o un ojal en el techo para sujetar la luz. Perfora un agujero en el techo con un diámetro ligeramente inferior al de la parte roscada de la luminaria.
- Conecta el cableado. Lo mejor es utilizar una tira, no una conexión por torsión. Una vez conectados todos los elementos, comprueba que el sistema funciona. Enciéndelo durante un corto periodo de tiempo para comprobar que todo está bien.
- Si tienes un termostato, comprueba que funciona y establece una temperatura mínima para que la lámpara se apague cuando llegue al límite establecido.
Si tienes que retorcer los cables, debes soldar adicionalmente las uniones y cubrirlas con tubo termorretráctil. Entonces, si la humedad cambia, los contactos no se oxidarán.
Instalación de calentadores
Lo primero que hay que hacer es consultar las instrucciones de instalación para saber cuál debe ser la distancia mínima entre el calentador y la superficie. Una vez seleccionado el lugar de instalación, siga los consejos:
- Estudia las características de montaje. Las fijaciones más comunes son a través de agujeros en los soportes o en el plástico, se incluyen tornillos autorroscantes. Basta con alinear el equipo y fijarlo al techo. Lo mejor es que dos personas realicen el trabajo, y que una de ellas sostenga el calentador.
- Conecte el mazo de cables, respetando la polaridad, siguiendo las instrucciones del diagrama del circuito, que siempre se incluye en las instrucciones. Asegurar un buen contacto.
- Prueba el sistema. Lo mejor es dejarlo funcionar a la máxima temperatura y asegurarse de que las superficies no se sobrecalientan.
¡Por cierto! Puedes instalar un sistema de monitorización de última generación para comprobar las cifras o controlar el calentador a distancia a través de un smartphone.
Precauciones de seguridad
Al igual que todos los equipos eléctricos, las lámparas de infrarrojos y los calefactores deben funcionar de acuerdo con unos requisitos sencillos:
- Instale el cable sólo en interiores utilizando un conducto no combustible. Esto es especialmente importante en las superficies de madera.
- Proteja todos los contactos y conexiones de la humedad y cúbralos. Los tapones sellados son una buena idea. Como alternativa, se puede colocar la torsión en un tubo termorretráctil y poner encima un trozo de funda ondulada cortada por la mitad.
- No coloque el calentador o la lámpara a menos de 50 cm de la superficie. Esto es peligroso, tanto por el sobrecalentamiento como por las quemaduras del ave.
- Si existe el riesgo de que alguien toque el calentador o la lámpara, asegúrese de proteger la estructura con un marco de seguridad. Puedes fabricarlo tú mismo con alambre de acero de 4 mm de diámetro o más.
- Utiliza un casquillo de cerámica en lugar de uno de plástico para montar las lámparas, ya que es más resistente a las altas temperaturas.
- Si el cuerpo de la lámpara o del calefactor se calienta mucho, se puede cubrir la superficie del techo por encima con un trozo de chapa o papel de aluminio.
- Siempre debe incluirse en el sistema un dispositivo de corriente residual o un disyuntor para desconectar el calentador en caso de cortocircuito o sobrecarga.
Videotutorial para reforzar la información: Calentar el gallinero en invierno.
La calefacción por infrarrojos en el gallinero es fácil de instalar, requiere un mínimo de materiales y sólo lleva unas horas de trabajo. Esto mantiene el gallinero a una temperatura agradable y las gallinas pueden poner todo el año, compensando así los gastos de calefacción.